En un campamento al norte de California vivía una familia de indios. Un día fueron a dar una vuelta por una pradera con sus caballos. El padre indio le explicaba a su hijo los valores de la vida y las virtudes de la naturaleza. El niño quería enseñar todo lo que había aprendido a sus amigos, por lo que les fue a buscar y se fueron a caminar por el bosque. Fueron por un estanque donde se aparecieron dos caras de sus antepasados y después de eso se aparecieron las mismas caras en el cielo. Ellos lo interpretaron como una señal, un aviso por algo...y tenían razón, porque cuando volvieron al campamento se encontraron con todo destrozado...todos los árboles estaban talados y no había vida ya allí.
Esto les causó gran desolación y con paciencia y tiempo poco a poco fueron recuperando el antiguo paisaje...grandes árboles, plantas de todas las especies, flores de todos los colores y animales corriendo por allí...haciendo que estuviera tan vivo como en el pasado.
Katiiia*!♥
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